Leocadio Rueda Checa

Nombrado socio de honor el 14 de nomviembre del 2021 por su compromiso de conservación de la Naturaleza e interés por el colectivo AMECO.

Leocadio Rueda es uno de los últimos supervivientes de una rancia estirpe de pastores serreños que se resiste a desaparecer. Testigo privilegiado de los avatares históricos y ambientales acaecidos en la sierra de Andújar desde mediados del siglo XX, escuchar a Leocadio es viajar en el tiempo a través de los recuerdos y anécdotas pastoriles propias de una cultura que agoniza, y que se pone en valor en sus libros.

Leocadio aprendió desde pequeño a custodiar el territorio desde el arraigo y el manejo racional de los recursos naturales. El resultado de este uso sostenible durante siglos del monte mediterráneo es el Parque Natural Sierra de Andújar, un tesoro de la diversidad biológica de la península ibérica, cuyo paisaje no es sino el fiel reflejo de la personalidad de quienes lo domeñaron.

Ahora, cuando más presas silvestres hay, el lobo y el ganado doméstico prácticamente han desaparecido de la sierra de Andújar. No deja de ser llamativo que, como si de una macabra casualidad se tratase, los destinos del lobo, de la oveja y del pastor vayan irremisiblemente unidos hacia la desaparición de todos ellos ante el empuje de la caza mayor.

Este pastor de otro tiempo combatió al hoy casi extinto lobo andaluz ejerciendo su profesión: aplicando medios tradicionales de defensa del ganado que minimizan los daños, como el uso de mastines, vacas pajunas o mulos romos para defender los rebaños de ovino, el empleo de barbacanas o la utilización de rediles para encerrar a las reses por las noches, tal y como se cuenta en el libro.

Leocadio es la prueba viviente de que, en pleno siglo XXI, la coexistencia entre la ganadería y los grandes carnívoros en Europa es posible.